Spanish Mini-book on Marriage & Premarital Counseling - Dual Topic
Matrimonio:
Para tenerte y protegerte
Dios tiene un propósito singular para el pacto matrimonial. La relación de casados nos da la maravillosa oportunidad de modelar la relación de Cristo con su esposa (la iglesia). De la misma forma en que Cristo se dio a sí mismo a la iglesia, usted y su cónyuge deben estar dispuestos a sacrificar sus deseos individuales por el bien del compromiso marital.
Dios utiliza la relación matrimonial como un cincel para eliminar nuestros problemas personales que no se han resuelto. Cuando el matrimonio tiene problemas, es que Dios trata de llamar su atención para que uno o ambos de ustedes cambien.
El deseo de Dios es que ambos cónyuges abandonen el egoísmo y decidan comportarse en forma sacrificial y muestren un amor conforme a la voluntad de Dios
“Luego Dios el Señor dijo: «No es bueno que el hombre esté solo. Voy a hacerle una ayuda adecuada»... Por eso el hombre deja a su padre y a su madre, y se une a su mujer, y los dos se funden en un solo ser”.
Génesis 2:18, 24
Consejería Prematrimonial:
¿Esta listo para el compromiso?
La consejería prematrimonial es la orientación y guía práctica que se ofrece a una pareja para ayudarles a desarrollar una comunicación abierta y honesta en preparación para el matrimonio.
Si no se establece la comunicación antes del matrimonio, es posible que después, cuando sea demasiado tarde, se den cuenta de que no tenían muchas cosas en común. Desde el principio, cuando Dios dijo “no es bueno que el hombre esté solo” (Génesis 2:18), los hombres y las mujeres se han dedicado a buscar a la persona idónea para compartir su vida. Es por eso que si una persona soltera busca a “cualquier” pareja, podrá ocasionarse muchos problemas desde el inicio del matrimonio.
Un matrimonio cristiano es un pacto que se lleva a cabo entre un hombre y una mujer, ambos comprometidos con Jesucristo. En este pacto, unen sus vidas legalmente, física y espiritualmente como marido y mujer.
“No formen yunta con los incrédulos. ¿Qué tienen en común la justicia y la maldad? ¿O qué comunión puede tener la luz con la oscuridad?”
2 Corintios 6:14